Materiales:
- Globo
- Cola blanca
- Cuerda aproximadamente 60 metros
Ya podemos empezar!!
1.- Inflamos el globo hasta la medida que queremos para nuestra lámpara.
2.- Mezclamos la cola blanca con un poco de agua y empapamos la cuerda en esta mezcla (cuidado con no dejar la cola demasiado líquida o se resbalará por el globo)
3.- Vamos rodeando el globo con la cuerda encolada, si veis que se cae darle unos minutos para que la cola fije un poco y volver a intentarlo. Debemos dejar en la parte superior del globo un agujero para poder meter luego la bombilla o el mecanismo eléctrico de la lámpara.
4.- Dejamos secar unas 24 horas. Si posamos nuestro globo sobre una superficie, como veis en las fotos, acordaros de darle la vuelta al cabo de unas horas para que la parte inferior también se seque.
5.- Una vez que la cola esté bien seca tenemos que pinchar el globo. Para que no se explote yo he pegado un pedazo de esparadrapo y con una aguja he picado en ese trocito varias veces y así poco a poco se va desinflando.
Sacamos el globo y… ¡TACHÁN! Ya tenemos terminada nuestra nueva lámpara.
Ya sólo queda colocarla en ese techo solitario y encender la luz. ¡Qué bonito nos ha quedado!
Si la lámpara os gusta más tupida sólo tenéis que dar alguna vuelta más de cuerda pero recordar que cuanta más cuerda menos luz dará.
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